SANTO DOMINGO.- El diálogo entre el Gobierno, los prestadores de servicios, las Aseguradoras de Riesgos de Salud (ARS) y los farmacéuticos, de cara a reformar la Ley 87-01 que crea el Sistema Dominicano de Seguridad Social, sigue sin ofrecer una perspectiva clara sobre si se lograrán cambios en esta normativa.
Al ser cuestionado por Diario Libre, el presidente de la Unión de Farmacias, Raúl Hernández Castaños, afirmó que «no parece» que habrá una reforma en el corto o mediano plazo.
«Eso está en manos de las autoridades. En el Congreso, tanto los miembros de la Cámara de Diputados como los Senadores, expresaron sus pareceres. Cuando hay tanta gente opinando diferente, da mucho trabajo ponerse de acuerdo. Y nosotros lo que decimos es que si no nos ponemos de acuerdo, es mejor que lo dejen como está», manifestó.
Premios Mortero de Oro
La Unión de Farmacias celebra este domingo la decimoquinta versión de los premios Mortero de Oro, un acto en el que distingue a las principales personalidades del sector que merecen ser reconocidas por sus aportes y su trayectoria.El gremio retoma el evento tras cuatro años de ser paralizado por la pandemia de covid-19.Para esta edición, el Gran Mortero de Oro fue entregado al empresario Bienvenido Antonio Ángeles; el Mortero de Oro Especial fue entregado a la compañía Ethical Farmacéutica y el Mortero de Oro Póstumo homenajeó la memoria de Franklin Díaz Reyes, uno de los fundadores de la Unión de Farmacias en el 1984.
Alerta por «integración vertical»
Para Hernández Castaños, las ARS buscan una «integración vertical» de la seguridad social que podría generar «demoledoras consecuencias» para la protección social, al perderse el enfoque sobre su bien colectivo «por un concepto social puramente económico».
«Ya se está hablando, en los aprestos de revisión de la ley de seguridad social, de posibles integraciones verticales (…), que las ARS importen medicamentos y dispensen, controlen los médicos, controlen las farmacias y que tengan el negocio completo desde arriba hacia abajo», remarcó.
El dirigente gremial ofreció estas palabras durante una rueda de prensa, previo a la gala de los premios Mortero de Oro, una actividad que se celebra en el marco del trigésimo noveno aniversario de la institución y la conmemoración del Día del Dueño de Farmacias el pasado 31 de octubre.
Alertó que uno de los cambios que entró a la mesa de las discusiones de comisiones que participan en la reforma de la normativa era que las ARS pudieran «sustituir medicamentos» cuando lo consideraran de lugar.
«Un médico indica algo y la ARS, por asunto de costos o lo que sea, no lo autoriza. Está controlando el mercado», enfatizó a Diario Libre.
Alertó que esta situación ya ocurre en los centros de atención primaria, donde los médicos «recetan medicamentos que responden a ellos y dan indicaciones para laboratorios que son de ellas (de las ARS)».
Explicó que este es uno de los aspectos por los cuales las conversaciones no avanzan, pese a las propuestas que se han compartido desde el Consejo de la Seguridad Social (CNSS) y la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (Sisalril).
«Ese es el problema de la seguridad social, que hay demasiados intereses y todo el mundo quiere jalar para su lado y llevarse el pastel completo», señaló.
Farmacéuticas y la facturación
Para el líder gremial, el sector farmacéutico es el que soporta financieramente el suministro de medicamentos en la seguridad social, al ser el único ente autorizado para ello según las leyes vigentes.
Dijo que estos negocios entregan las facturas a las ARS de las compras de medicinas que realizan sus afiliados a los 30 días y que, sin embargo, estas entidades se retrasan un mes más para efectuar el pago a las farmacias, además de cargarles una tasa de 10 % a la facturación.
«Lo grande es que tú le pides un comprobante para poderlo justificar (la tasa) en Impuestos Internos y tampoco lo dan. Ese es un numerito que va para el bolsillo de ellos», deploró.
