COTUÍ, Sánchez Ramírez.- Un oficial de la Policía Nacional se hizo pasar por sacerdote, que era requerido por un joven que tenía secuestrado a un niño como condición para entregarse, pero mientras el secuestrador dialogaba con el falso religioso, otro agente policial le disparó de un balazo en la cabeza.

El oficial, teniente coronel e ingresó al interior de la vivienda donde se había recluido el hombre identificado como José Antonio Reyes Ulloa con el niño que tenía de rehén.
El hecho ocurrió en el sector La Cruz, del municipio de Cotuí, en la provincia Sánchez Ramírez, y varios vídeos tomados por curiosos muestran que el joven Reyes Ulloa pedía la presencia del sacerdote para negociar su salida de la casa donde estaba recluido junto con el niño.
El secuestrador Reyes Ulloa era buscado por la muerte de otro joven, pero él insistía en que no lo había matado y que, por el contrario, le tenía mucho respeto.

La vivienda estaba rodeadas de agentes policiales y un fiscal adjunto de esa demarcación.

El secuestrador estaba dentro de una habitación de una casa habitada.
Reyes Ulloa, desde la habitación con una puerta que daba a la calle, entabló una conversación con el oficial Lora Báez quien le decía que ninguno quería tener problemas y le pedía que se entregara que el fiscal le garantizaría su integridad.
En el diálogo participó la periodista Solange Borges, quien con insistencia le pedía que confiara en ella y que se entregara, pero el raptor decía que “solo confiaba en Dios Todopoderoso”.
El fiscal identificado como Rolando le pedía que entrega al niño ileso y que luego se entregara bajo las garantías de que se le preservaría su integridad.
El secuestrador insistía en que requería la presencia del sacerdote para entregarse porque no quería que lo arrestaran ya que varias ocasiones había estado preso y le habían golpeado.
El fiscal actuante entabló la conversación con el secuestrador que le insistía en que no quería que lo mataran a lo que el representante del ministerio público le respondía dándole garantía.
El coronel Lora Báez se puso sotana y estola para entrar donde estaba el secuestrador con el niño.
El primero en ingresar fue un agente llamado “Mónico” y que era conocido por Reyes Ulloa. Ya dentro, el secuestrador le pide a Mónico que se sentara y entonces autoriza que entre el supuesto sacerdote y la periodista local que estuvo grabando en todo momento señalándole que esa grabación era una garantía de que no sería maltratado.
El secuestrador dejó de apuntarle con la pistola al niño para encañonar al agente que él llamaba “Mónico”. Entonces empieza a decir que él no mató a nadie, que él solo se defendía.
Previamente había señalado que era otra persona la que había matado al joven ,acto por lo que era buscado por las autoridades.
PN investiga

La Dirección General de la Policía Nacional ordenó una exhaustiva investigación con relación al caso de un hombre armado que cayó abatido tras herir a un adolescente y raptar a una mujer junto a su hijo de un año, dentro de la vivienda de ésta, en el municipio de Cotuí, provincia Sánchez Ramírez.
Para las pesquisas fue designada una comisión tanto de la Inspectoría General como de la Dirección Central de Asuntos Internos de la institución, a los fines de aclarar las circunstancias que dieron origen a este hecho que mantuvo en vilo a los residentes del lugar de los hechos.
El fallecido fue identificado como José Antonio Reyes Ullola (a) El Gordo, a quien se le ocupó una pistola calibre 9mm., con la cual también hirió a un adolescente de 17 años, cuyo nombre se hace reserva.
De acuerdo al informe preliminar, Reyes Ullola (a) El Gordo habría atacado al menor en supuesta represalia por haberlo denunciado ante las autoridades en relación a la muerte de un hombre identificado como Heriberto Santana Evangelista (a) Cacón, cuyo cadáver fue encontrado sepultado en una zona montañosa del sector Las Colinas, de Cotuí.
Fue entonces que policías adscritos a la Dirección Regional Cibao Sur entraron en acción con el objetivo de rescatar a la mujer y su hijo, a quienes Reyes Ullola (a) El Gordo tenía en cautiverio, situación en la que cayó abatido, mientras que las víctimas de rapto salieron sanas y salvas.La comisión investigadora se dirigió hacia el lugar del suceso para esclarecer lo sucedido.


