CUBA.– El huracán Melissa, actualmente con categoría 3 en la escala Saffir-Simpson, tocó tierra en la costa sur del oriente cubano durante la madrugada de este miércoles, acompañado de vientos violentos, intensas lluvias y una fuerte marejada ciclónica.
El Instituto Meteorológico de Cuba (Insmet) informó que el sistema cruza el oriente de sur a norte con vientos máximos sostenidos de 193 km/h, mientras descarga precipitaciones que podrían superar los 450 milímetros en algunas localidades.
El fenómeno impactó el territorio cubano cerca de las 3:10 de la madrugada, por el municipio de Chivirico, avanzando a unos 35 kilómetros por hora. Las autoridades estiman que, tras permanecer entre seis y ocho horas sobre tierra, Melissa volverá al mar por Banes, aunque sus efectos se sentirán por más de diez horas adicionales.
Más de 735 mil evacuados
En las seis provincias en alarma ciclónica —Granma, Santiago de Cuba, Guantánamo, Holguín, Las Tunas y Camagüey— 735,000 personas han sido evacuadas o trasladadas a lugares seguros. La mayoría se refugió en casas de familiares, mientras otros permanecen en espacios habilitados por el Estado.
El paso del huracán ha provocado la paralización total del transporte público terrestre, marítimo y aéreo, la suspensión de clases y la protección de infraestructuras estratégicas y cultivos.
Dos de las siete centrales termoeléctricas del país fueron detenidas como medida preventiva, debido a su vulnerabilidad y riesgo de daños estructurales.
Jamaica bajo impacto
Un día antes, Melissa azotó Jamaica como huracán categoría 5, dejando severos daños en infraestructura, más de 530,000 usuarios sin electricidad y comunidades incomunicadas por afectaciones en carreteras y puentes.
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, pidió a la población actuar con responsabilidad y extremar las precauciones, advirtiendo que será una jornada “muy difícil” para el país.
