SANTO DOMINGO. – En el marco de la Operación Pandora, las autoridades informaron que han descubierto un esquema ilegal que implicaba la modificación de armas de fogueo para convertirlas en pistolas completamente funcionales, destinadas al mercado clandestino de armamento.
Esta actividad representa un grave riesgo para la seguridad pública al facilitar la circulación de armas de fuego sin control alguno.
Las armas de fogueo, diseñadas originalmente para disparar cartuchos sin proyectiles y utilizadas comúnmente en simulaciones o entrenamientos, eran alteradas mediante el cambio del cañón para permitirles disparar municiones reales.
Este procedimiento ilegal las transformaba en pistolas letales, que posteriormente eran comercializadas a civiles y miembros de redes delictivas.
De acuerdo a la acusación del Ministerio Público, los responsables utilizaban herramientas especializadas para cambiar el cañón de las armas de fogueo, asegurando que estas pudieran disparar proyectiles reales con precisión.
Una vez modificadas, estas armas eran vendidas en el mercado negro a precios superiores a los originales, lo que representaba una ganancia significativa para los implicados.
Además, estas eran distribuidas a través de un mercado clandestino que involucraba a civiles, policías, militares y armerías ilegales.
-La circulación de estas armas alegadamente transformadas plantea múltiples riesgos:
1. Incremento en la violencia armada: Las armas modificadas pueden ser utilizadas en actividades delictivas, aumentando los niveles de inseguridad.
2.
2. Dificultad en el rastreo: Al tratarse de armas no registradas como letales, su rastreo por parte de las autoridades resulta casi imposible.
3.Amenaza a la seguridad pública: Estas modificaciones ponen armas peligrosas al alcance de personas con antecedentes delictivos y organizaciones criminales.
La Operación Pandora ha permitido identificar a los principales acusados de esta presunta actividad ilícita, quienes enfrentan cargos por tráfico de armas, alteración de dispositivos de seguridad y conspiración.
Coronel Narciso Antonio Feliz Romero, encargado de la custodia de armas y municiones PN; Juan Miguel Soler Pérez ; Nelson Valdez; Víctor Manuel Santos Rodríguez.
Asimismo, Ángel Rubiel Martínez Bacilio; Juan Luis Díaz Medina; Miguel Ángel Gómez Espaillat; Morelbin Medina Pérez ; Marino Antonio Rodríguez Toribio y Miguelina Bello Segura.
Esta supuesta estructura criminal es involucrada de alcanzar un monto total estimado en contra del Estado de RD$ 64,954,505.48, en la venta de 908,001 municiones, detalla la acusación preliminar.
Por Ronny Pérez
